martes, 15 de enero de 2008

Algo recién salidito

Muy contento de estar aquí.

Hoy me puse el traje que tanto te gustaba como se me veía, cuando era más delgado y aún tenía cabello, claro. Sí, ese color beige que solía combinar con una camisa de tono vainilla y una corbata con rombos cafés. Hoy ya no se me ve tan bien, pensarás. El tiempo me ha maltratado un poco pero sigo siendo el mismo, aunque mis nudillos huelen cada vez más a cigarrillo y mis huesos parecen herrumbrados.
No me gusta mucho vestirme así bien lo sabes, odio tener que ponerme corbatas porque no sé. Todavía tengo que asistir a donde mi padre para que me haga el nudo. Qué dirían mis alumnos si vieran que todavía en ciertas ocasiones aún me viste mi papá. Se mofarían de mí, de su pobre y ridículo maestro de historia, el pendejo que nunca falta a clase y se jacta de comprar los libros más caros para no leerlos. Pero hoy quiero estar presentable.
Qué pena me doy cuando me miro al espejo, con esta cara, con este cuerpo, ¿cómo llegaste a amarme? Sabes que soy un fracasado, que no lograré publicar la novela que tanto he deseado y que ya tiene guardada más de un lustro. Que no compartiré las regalías contigo como te lo prometí aquella tarde en el metro.
Pero qué importa ahora mi miserable estado, mi vida, no debo arruinar con discursos fúnebres este día tan importante. Mejor, evoquemos nuestros momentos felices, pero ¿hubo algunos? Lo siento no es momento tampoco para reclamos y lloriqueos, disculpa las molestias. Sólo quería verte sin que te dieras cuenta, como siempre me gustó. No, no voltees por favor, quiero imaginar tu rostro sonriente y tus ojos brillando más que nunca, saber que estas bien y que eres feliz.
Yo te veré desde aquí, recargado en la entrada con mi camisa color vainilla y mi corbata de rombos y te lo juro que me iré en cuanto el sacerdote diga que la misa ha terminado y tu le aprietes la mano al hombre de al lado como lo hiciste una vez conmigo, y cuando estés a punto de besarlo yo ya iré de regreso a casa a tomar un buen vino, sin embargo pensaré en regresar, felicitarte y decirte que estoy muy contento de estar aquí y preguntarte ¿por qué nunca vimos una película juntos?

Aljeorne

No hay comentarios: